Hoy después de mucho tiempo sin escribir, hago una nueva entrada haciendo una mirada hacia atrás. Todos hemos tenido uno de esos días en que dejas la mirada fija... y tú cabeza empieza a recordar... buenos momentos, otros no tan buenos.
Cuando era pequeño, siempre tuve una amistad increíble con alguien, digamos que era un amigo. Siempre estábamos juntos a pesar de que decidió hacer su vida fuera de su isla de origen. Siempre nos llamábamos. Siempre que podía, yo con mi corta edad, creo recordar que la primera vez fue con sólo 11 años, viajaba a verle. Él siempre me recibía con sus brazos abiertos.
Hace unos años, tenía un buen amigo, el mejor de todos. Siempre contaba con él. Ese amigo siempre me ayudaba, digamos que me tenía en cuenta. Me quería. Pasamos muchos momentos buenos juntos.
No sé que pasó para que ahora me trate mal. Como si no existiese.
Me hizo daño.
Quizás haya sido la fama lo que le fue cambiando poco a poco. Es un luthier bastante bueno, de los mejores del momento.
A día de hoy no nos hablamos. No quiero saber nada de él.
Me he enterado que el viaja con mucha frecuencia a Tenerife, donde yo vivo. Ni una llamada.
Creo que si esto me hubiese sucedido con otra persona, no me hubiese importado tanto.
¿Te preguntas de quién hablo? Mi hermano. Mi hermano mayor.
Un saludo!!
Te entiendo.
ResponderEliminar